Besterik et duzu
(Solo tú sabes)
8 de Mayo, 2019
Solo tú sabes,
que simple era amar tu querer.
Sencillo, como tu complejidad sosegada,
tu personalidad dispuesta,
el aspecto firme de tu calma.
La misma dualidad de la idiosincrasia
Tu piel dulce de motas canela,
el pelo despeinado y encendido,
gritando a boca llena la dureza de lo vivido.
Confirmando que eres digna de mil prosas,
abalando las noches temblorosas,
que el lloró entre versos al alba.
Recordando tiempos pasados,
deslumbrado por la nada en tu presencia,
se pregunta si la vida tan solo se trataba,
de conmutar en un juego de palabras,
Amar por cuidar, cuidar por amar,
hacer que los otros se sientieran en casa.

El dibuja tu silueta en una ráfaga cuando versa,
con el pecho henchido, y al descubierto,
y en la mano una lanza en forma de rosa.
Esa que te entregaba temblorosa,
esperando que tus labios evitaran el beso,
que tus ojos confesaran lo que ocultaba tu boca.
Quietos tus ojos esmeralda,
esperando esa mueca cautelosa.
Ávidos de fuego en su dulzura,
serenos de quien se sabe victoriosa.
Transformado la imperfección del querer,
en eso que todo el mundo adora.
El, hoy, un porcentaje de lo que fue,
olvida sin ti a que sabe el querer.
Mientras el tiempo inevitable,
le transformó en el héroe que no quiso.
Sentado en su trono ajado y achacoso,
vive en el recuerdo de sí mismo.
Ama, Amá, te Ama.
En esta reminiscencia mundana,
rastrea en otras pupilas tu alma.
Soñando que el destino es pesadilla,
que huye sin querer queriendo de esta vida.
Tocando fondo, echando de menos,
con la sonrisa airosa, la mirada abatida.
Teniendo por siempre presente,
que el amor verdadero jamás se olvida.
