¡Búsquese una vida!
20 de Diciembre, 2020
¡Búsquese una vida!
Usted, sí, usted.
Sí, sí, me ha oído bien. Le decía que se buscara una vida.

Una que le llene lo suficiente, que le haga vibrar, que le moje las entretelas. Una de esas que le dibuje una sonrisa de vez en cuando, que le sorprenda, que le emocione, poco teórica y mucho de piel, aunque a veces duela.
Sea curioso y búsquese una vida, a poder ser no extraterrestre, que eso acaba dando dolor de cuello de tanto mirar hacia arriba, y le vuelve loco a uno, además la NASA lleva décadas intentándolo sin éxito alguno.
Una de esas microscópicas para el mundo, mayúsculas para quien les rodea. De aquellas que solo desaparecen cuando no hay nadie que las recuerde.
Ya verás repita conmigo. ¡Quiero una vida! ¡Quiero una vida! ¡Quiero una vida!
Después de este conjuro solo caben dos opciones; o desaparecen las vidas de todos, o aparece la suya.
Así que no tenga miedo y como le pedía, ¡búsquese una vida! Sin prisa, no se atragante, busque, compare, decida, y solo cuando lo tenga claro, quédesela. ¡Quédesela y no la suelte!, que hay más de uno que mataría por vivir la suya.
Una para respirar, dormir, comer, caminar, reír, llorar, leer, amar y sobre todo follar. No se corte, que la vida ya es complicada. Y cuanto más queremos que la vida sea fácil, más difícil nos la hacemos.
Si es de criticar, tenga la sangre en paz, y no se repita mañana lo dejo, porque como diría James Bond "el mañana nunca muere". Y búsquese una vida, aunque parezca que vaya a contracorriente, aunque se arruine, aunque tenga miedo, que aunque no lo parezca todos merecemos una.
¡Búsquese una vida!, una con significado, aunque no la entienda. No importa. Y disfrute de la incoherencia de lo que pensaba ayer, relájese y tome una siesta.

Si conoce a "alguno", no apadrine un quejica, porque luego no querrá irse, y aunque la ira y el amor dejan señales, son bien distintas. Y ¡búsquese una vida!, que no le dé pereza. Por si acaso, por si vienen mal pintadas y se acaba pronto, que en este mundo tan solo estamos de visita y "en el último trago nos vamos".
Una vida, aunque sea de esas breves, pero épicas, como la de James Dean, Marilyn Monroe, Kurt Cobain, Amy Winehouse, Bob Marley o Heath Ledger. Usted escoja la que más le guste, en este mundo siempre es Black Friday, y no tenemos tiempo para que se pase de largo.
Si algún día le da por jugar al prejuicio justo que sea por algo interesante, no por caminar en círculos. A veces uno busca una vida y no va bien, pero, oigan, incluso así uno se queda con la conciencia tranquila.
Búsquese una vida, en el campo, bajo las piedras o sobre las montañas, o por el contrario hágalo en la ciudad entre los rascacielos, el ruido y los contenedores como hacen otros.
Una vida, aunque haya días que no tenga ganas de nada y no encuentre la meta. Entonces en ese instante pare, haga recuento y tome conciencia, de que nunca jamás será demasiado joven.
Si se aburre, aplíquese el cuento, e invéntese la suya propia. Siempre será mejor que mendigar o robar la de otros. Llénela de sueños, de esos grandes que parecen imposibles, como Mary Baker, Ferdinand Demara o Frank Abagnale. Al final si no acaba bien, siempre tendrá para contar una gran historia.
Como le decía al principio, ¡búsquese una vida!, una vida propia, que Satanás solo vende objetos usados.
