DE FE aCTOS
7 de Noviembre, 2021
Los ocultamos porque nos dan vergüenza, porque el que dirán nos da miedo. Los enviamos al ostracismo, tapándolos como podemos. Los maquillamos, los negamos cuál Judas si nos los pillan, los silenciamos, les hacemos de menos. Los "aceptamos", en la continua búsqueda de su lado positivo y no el auténtico. ¿Para qué?, para que en el silencio y la intimidad de la noche, nos quiten el sueño.
Mutan, transitan, evolucionan, siempre en función de la percepción que tenemos. Tú criticando los de otros, ellos criticando los nuestros. ¡Qué audaz la cobardía envenenándonos con recelo! Tabús, medias bromas, buscando el continuo objetivo de hacerlos secretos.
La excelencia, la exigencia, la sociedad los llama defectos. Sin preguntarse siquiera, ¿Qué hay de cierto? "La industria" no busca la diferencia, sino clasificar su funcionalidad, su armonía visual,... que sea igual al modelo.

Ser perfecto; si la vida te adopta, no es para caminar solo del blanco al negro. No te falta nada, únicamente es otra forma de ser, de ver, de hacer, lo que se supone "correcto". ¿Qué tal si lo ignoras te dicen?, ¡así ya no pienso en ello!
Físicos, intelectuales, sociales,... todos acaban; como las virtudes, en el cementerio.
La cruda verdad es que los ocultamos, porque en realidad, lo que nos asusta, es lo que nosotros mismos creemos de ellos.
Quizá nuestro acto de fe para con esta vida, es olvidar lo que aprendimos, quizá, como afirma una amiga; ¡nos urge conocernos de nuevo, que no de cero, sin mascarillas, sin filtros, sin miedos!