Es increíble

23 de Septiembre, 2018

 "Hay sociedades sin escritura pero ninguna sin música"

Es increíble como la música entra sin que te des cuenta hasta lo más profundo, sin hacer herida, pero dejando su huella en el recuerdo. Es increíble como de la nada hace emerger los sentidos, y te transporta inevitablemente a aquel instante, a aquel rincón de la memoria que solo es tuyo, aquel a quien nadie explicaste.

Es increíble su capacidad para darle la vuelta a todo, para relajarte, animarte, o hacer que las lágrimas asomen curiosas por debajo de los parpados. Es increíble incluso, como a veces te abraza en la soledad de las noches más oscuras diciéndote: tranquilo, mañana será otro día. O como hace que se te disparen los pies a pesar de que suene en la acera de enfrente, y tú estés cargado de nervios, a punto de entrar en la reunión más importante de toda tu vida.

Es increíble como una canción que nunca jamás habías escuchado antes, de repente cobra tanto sentido en tu día a día. Es increíble cómo cambia la escena de una película, como cambia un poema, como puede alterar el alma, abrazándola o desnudándola, preciso como un bisturí. Es increíble su capaz innata de comunicar, y de cambiar el ritmo, tan sutilmente como una pluma eriza los poros de tu piel, cuando se resbala por tu espalda.

Es increíble cómo te cambian los gustos con los años, y de repente pasas de escuchar Backstreet Boys a Guns and Roses, o de Britney Spears a Joaquín Sabina. O viceversa (las malas lenguas comentan que algún caso se ha dado).

Es increíble como una nota te mantiene en la incertidumbre hasta que llega la próxima, igual que un surfista espera el momento exacto para lanzarse a coger la ola. Es increíble cómo puede anticiparse al lenguaje humano, o modificarlo, para hacerte creer que la emoción que subyace a ese momento, en realidad otra.

Es increíble como la música no entiende de límites, y por eso se repite, y se repite, y se repite, una y otra vez en tu memoria, y en tu boca, hasta que alguien viene y te dice: ¡Coño Alberto!, ¿No sabes cantar nada más que ese trozo?

Es increíble como una canción permite compartir sentimientos con otra persona. Es increíble el efecto multiplicador cuando toca una de esas emociones estéticas, y la transforma de algo diminuto, en algo gigante. Es increíble el efecto liberador para aquellas inquietudes dormidas, que a veces ni siquiera sabemos que están, pero que ella se encarga de encontrar, y sacar a flote por más que se encuentren sumergidas.

Es increíble como cada persona tiene en su interior una especie de canción que se transmite cuando la conoces. Y aunque no me creáis, es increíble como a veces, justo en ese momento, solo te apetece bailar esa misma canción con ella.

En honor de todas aquellas personas importantes en mi día a día, y las canciones que bailaría con ellas.