Papiroflexia
12 de Mayo, 2019
- Paso 1 -
Colocaron sus vidas de forma apaisada, dejando sus imperfecciones en los extremos, pensando que así su historia sería más larga. Desempolvaron las instrucciones de lo que creyeron correcto, y siguieron cautelosos paso a paso los consejos de su propia pitia. Con el tiempo, comenzaron a plegarse y desdoblarse como en un juego, procurando dejar las líneas bien marcadas para los pasos futuros.
En ellos, se doblaron hacia el centro, buscando en lo más profundo esos deseos que tan solo fueran suyos, bautizándolos con otros seudónimos para que no recordaran los amores gastados.

- Paso 2 -
Arquearon sus dudas iniciales, y los papeles, con la bella forma de un cometa, intentaron encajar sus aristas dulcemente en su acrobacia, allí a la altura de las nubes terciopelo. Los vértices convergieron de frente en su arrebato, chocaron de punta, y aturdidos, planearon durante un tiempo a media asta, porque a veces es mejor no ver los daños hasta que uno no se estampa estrepitosamente contra el suelo.
Ellos se miraron cómplices, sonrieron en una mueca, juraron no haber visto nada, y le dieron la vuelta a todo, tapando así la primera arruga.
- Paso 3 -
Curvaron los ángulos para evitar fabricarse heridas, siguiendo siempre las líneas de puntos, haciendo cada paso lentamente, evitando enredar sus hilos, transformando su cometa en un diamante. Y por un tiempo la vida brilló entre sus formas, como si nada pasase, a pesar de que ellos se sabían incompletos en su propósito.
Al final reemprendieron el puzzle, y aprendieron entre dobleces que a veces la figura de belleza inquebrantable, esconde falsedades entre sus frunces.

- Paso 4 -
Se encontraron finalmente ante el último paso, un minúsculo surco que daba por acabada la figura, y pausaron el tiempo en su incertidumbre, titubeando ante la posibilidad de que allí se acabara todo. Finalmente lo hicieron, y al darle la vuelta, contemplaron su corazón lleno de manchas y arrugas, y optando por no amar sus defectos, abandonaron el papel en su egoísmo.
Apergaminados, un tiempo más tarde, quisieron empezar de cero, pero en el amor anómalamente sirve eso de: "si la primera vez que la hacemos sale mal, lo mejor es coger otro papel y comenzar de nuevo."